Es uno de los cosméticos estrella para los maquilladores y quizás uno de los menos conocidos entre las mujeres…y es que “iluminar es un arte” si lo haces bien ¡EUREKA! has ganado naturalidad, un rostro más angular y un aspecto de frescura fabuloso…pero como cometas ciertos errores ¡estas perdida! y te aseguro que tu rostro será de todo menos favorecedor. Si quieres aprender a sacarle partido a estas texturas mágicas, aquí te dejo mis TIPS.
ERRORES QUE NO DEBES COMETER CON EL ILUMINADOR
Error 1: aplicar en sitios inapropiados
Error 2: aplicar cantidades excesivas
Ahh! y un tercer error que a veces sucede, confundir el iluminador con el corrector de ojera. Cuando iluminar de forma correcta la piel irradia vitalidad, es pura luz, si lo aplicas debajo del ojo de forma inadecuada tendrás dos bonitos “farolillos” nada favorecedores.
CORRECTOR VS ILUMINADOR
iguala el tono de la piel, corrige ojeras y disimula ciertas imperfecciones como manchas, rojeces marcas de acné o granitos. Es clave en el maquillaje y marca la diferencia entre un look de maquillaje perfecto y otro del montón.
Aporta un toque de luz/volumen al rostro, ya sea en toda su base o en zonas definidas que se deben resaltar. Los iluminadores son productos muy ricos en pigmentos, con una cantidad mínima obtienes un efecto máximo. Todo en exceso es malo y el iluminador no va a ser menos: genera una acumulación de producto en las líneas de expresión y arruguitas, añadiendo años y restando luminosidad a la piel.
Iluminar es un arte, la artista eres tú
para lograr una sensación más natural y tersa.
De matrícula de honor
por un tono más claro.